Crimen de la mente
La Alienación Parental, como programa implantado en el cerebro de un hijo a través del lavado de cerebro realizado por un padre, para provocar el divorcio parental (traducción correcta del término ingles Parental Alienation), tiene claros genes criminales que vamos a explorar... motivada por la venganza
La Alienación Parental afecta negativamente al desarrollo del cerebro de la víctima
Es una forma de maltrato psicológico que, como tal es medible y contrastable, lo que no deja margen ni para la opinión, ni la ideología. Es un crimen perseguible penalmente con pruebas de naturaleza objetiva y conductas perfectamente identificadas. La falta de auxilio judicial para detener este maltrato infantil por Alienación Parental, convierte a la Administración en colaborador necesario y no podemos descartar que esté incurriendo en el supuesto de Crimen de Lesa Humanidad, previsto en el Estatuto de Roma.
Por favor, no dejes de ver este resumen del vídeo, es de tve. Más detalles en la entrada sobre el lavado de cerebro.
La psicóloga detecta daños en los menores y advierte del peligro que corren. El padre confirma que se han convertido en unos salvajes desde que dejó de verlos y la jueza de turno, ignora las evidencias, se escandaliza del "conflicto enorme entre los padres", la madre que lava el cerebro a los hijos y el padre que sufre las consecuencias y por supuesto los hijos... Como los hijos, aunque no tienen edad para votar, porque son muy inmaduros para eso, no lo son para "seguir el programa implantado por el lavado de cerebro" y sentencia conforme al guion de género:
Como los hijos, emocionalmente teledirigidos por la madre, "quieren" no ver al padre, que el dogma de género santifica como situación ideal, pues que hagan lo que quieran y que les den morcillas a los hijos y al padre. ¡¡Viva la justicia de género!!
La Constitución Española ampara el derecho a la integridad psíquica
El artículo 15 y la doctrina del TC, son claros. Lo que no implica que se respete dejando a nuestros hijos indefensos ante esta forma de maltrato.
Alienación Parental, lavado de cerebro y secuestro emocional
La Alienación parental es una forma de lavado de cerebro hecho a un menor por uno de sus padres, con el objeto de dañar al otro.
El DSM-5, incluye en la categoría de Otro trastorno disociativo especificado 300.15 (F44.89) los casos en los que se produce "alteración de la identidad debido a la persuasión coercitiva prolongada e intensa: personas que han sido sometidas a una persuasión coercitiva intensa (por ejemplo, lavado de cerebro, reforma del pensamiento, adoctrinamiento en cautiverio, tortura, encarcelamiento político a largo plazo, reclutamiento por sectas / cultos o por organizaciones terroristas) pueden presentar cambios prolongados o cuestionamientos conscientes de su identidad.
En el diccionario de la Asociación Americana de Psicología, encontramos las definiciones de:
Una amplia clase de tácticas intensas y a menudo coercitivas destinadas a producir cambios profundos en las actitudes, creencias y emociones. Los objetivos de tales tácticas han sido típicamente prisioneros de guerra y miembros de cultos religiosos. Ver también secuestro psicológico.
https://dictionary.apa.org/brainwashingprivar a una persona del libre funcionamiento de su personalidad. El término a veces se usa para describir el control mental psicológico atribuido a los cultos. Ver también lavado de cerebro.
https://dictionary.apa.org/psychological-kidnappingHay sentencias que hablan de secuestro emocional. Lo que no sabemos es si los jueces que las han escrito, conocían la gravedad de lo que escribían.
Antecedentes nazis
Dicen los "expertos de violencia de género" que la Alienación Parental fue "inventada" por Gardner, ya que, según estos negacionistas, ésta no existe... pero lo cierto es que hemos encontrado antecedentes nazis de la aplicación militar de la Alienación Parental.
Lavado de cerebro y terrorismo
El lavado de cerebro no sólo se usa en los procesos de Alienación Parental. Los terroristas lo usan para reclutar activistas y funciona muy bien, básicamente porque pueden hacerlo con total impunidad.
Aicha (nombre ficticio), tenía 14 años cuando fue detenida en Melilla cuando intentaba cruzar la frontera con Marruecos para unirse a las filas del terrorismo yihadista en Irak, se presentó ante la juez de menores de la Audiencia Nacional con el cerebro “absolutamente lavado y centrifugado”, según fuentes judiciales. Cuatro meses de manipulación a través de las redes sociales, y la presencia en su entorno de simpatizantes salafistas formatearon su mente en tiempo récord. Una familia desestructurada solo contribuyó a hacer más eficaz el proceso de adoctrinamiento.
Tras tomarle declaración, la juez de menores dictó para Aicha una medida de internamiento provisional por seis meses en un centro de menores, acusada de un delito de integración en organización terrorista. El gran reto del sistema de protección de menores consiste ahora en concienciar a la adolescente de la gravedad del delito que estaba cometiendo y en inculcarle una serie de hábitos de disciplina y autoestima que permitan reinsertarla en la sociedad. Una especie de proceso inverso al lavado de cerebro que haga que la niña deje de ser una presa fácil de un grupo organizado.
La menor, que, según fuentes judiciales, llegó al centro “con el cerebro lavado y centrifugado”, está experimentando una “evolución positiva” en las últimas semanas y empieza a ser consciente de la gravedad del delito que estaba a punto de cometer y del peligro al que se exponía si se ponía en manos de los barbudos con los que planeaba viajar a Irak. “La medida de internamiento se está demostrando acertada. La niña está tomando perspectiva y creemos que estamos en buen camino hacia su reinserción”, afirman fuentes de la Audiencia Nacional.
Es decir, sabemos lo que hay que hacer para resolver el problema y los jueces no lo permiten. Tampoco lo hace el resto de la Administración, como veremos.
Como vemos, el lavado de cerebro no sólo lo usan los padres con los hijos, para dañar la relación con el otro padre, sino que es un arma terrorista para reclutar activistas. También es usada por sectas y hemos visto que su uso es una forma de maltrato que daña al cerebro y, curiosamente, resulta impune. Nuestro derecho Romano, no parece adaptarse fácilmente a las nuevas formas de crímenes de la mente, lo que facilita la impunidad de criminales gracias a la desidia política de aquellos que votamos... y a los jueces que nos colocan para controlar el parque de género.
A pesar de ello, el lavado de cerebro está muy documentado: Chlidren Held Hostage, nos ilustra cómo lo hacen los padres a los hijos, basta buscarlo en internet, para encontrar manuales eficaces para lavar el cerebro para reclutar terroristas.
La CBS plantea un serio problema: cómo revertir el lavado de cerebro hecho sobre menores para convertirlos en criminales. Como veis, nuestros políticos y jueces banalizan auténticos crímenes mediante el lavado de cerebro. Gracias a su profunda profesionalidad en charlatanería de género ni se enteran de la realidad que sufrimos. No digamos nada de las juezas...
Para la trata de blancas, tal como podemos ver en tve, también resulta muy útil el lavado de cerebro.
Las sectas antes y ahora los sistemas de venta piramidal, emplean el lavado de cerebro para dar caza a personas que pasan por una situación de debilidad psicológica y explotarles económicamente.
El lavado de cerebro también resulta útil a los depredadores sexuales de menores
Los depredadores sexuales, se valen del lavado de cerebro para abusar sexualmente de ellos.
Nuestro sistema es tan cruel que, cuando se liberan del secuestro emocional al que son sometidos, entonces se les dice que ha prescrito y se le reprocha a la víctima que no lo haya denunciado antes. La ignorancia judicial e cuestiones de lavado de cerebro es muy, pero que muy osada.
Teo sabe bien de lo que hablamos... su proceso debería de haber acabado con alguno que vive del dinero público en prisión, pero... gozan de impunidad de género.
No dejes de ver este caso y entenderás porqué los tiranos de género quieren tapar la Alienación Parental. El negocio de condena de inocentes se les vendría abajo.
Existe todo un movimiento negacionista, imbricado en el tejido político-judicial, que detallamos en la entrada sobre el movimiento negacionista. Afecta al gobierno, al CGPJ, Ayuntamientos y al que, se abonan también, una organización de juezas, que tratan de negar las evidencias, como revela la Sentencia de Manresa, que resolvió un caso claro de maltrato por Alienación Parental, lo que se tapa a la opinión pública y se le apaga judicialmente y que detonó el nacimiento del mencionado movimiento negacionista. El CafCass británico, con un sistema judicial más trasparente que el nuestro, perfila muy bien el fenómeno de la Alienación Parental. Incluso el Tribunal Supremo que, probablemente sin saberlo, da cabida a la existencia de esta forma de maltrato.
Especial mención merece el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, cuyo pronunciamiento, deja poco margen para la reinterpetación de la Alienación Parental.
La afección al cortex prefrontal de este tipo de maltrato, tiene especial relevancia judicial, porque afecta al "sentido de la responsabilidad", "al juicio" de las personas y por lo tanto a su responsabilidad en la comisión de delitos.
¿Si esta parte le ha sido dañada por omisión de nuestros políticos y jueces... quién sería el último responsable de la comisión de delitos de estas personas maltratadas?
Pacto de Estado para la ocultación del maltrato por Alienación Parental
Todos los partidos del arco parlamentario, excepto Vox, firmaron el infame pacto de estado que desprotege a la infancia frente al maltrato por Alienación Parental.
El n.º 129 del DGVG, relacionado con la Alienación Parental, establece:
Realizar aquellas actuaciones que sean necesarias para evitar que el denominado Síndrome de Alienación Parental pueda ser tomando en consideración por los órganos judiciales, fomentando el conocimiento entre los operadores jurídicos del significado de dicha expresión.
El SAP carece de base científica y está excluida de los catálogos de enfermedades científicamente reconocidas, por lo que será inadmisible como acusación de una parte contra la otra en los procesos de Violencia de Género, separación, divorcio o atribución de custodias a menores.
El encargo, para su ejecución es al Ministerio de Justicia y al Consejo General del Poder Judicial. El CGPJ, lo ejecuta, tal como podemos ver en este enlace, donde se lee:
y fomento, entre los operadores jurídicos, de un mejor conocimiento del llamado Síndrome de Alienación Parental (SAP) para evitar que, dada su carencia de base científica, pueda ser tomado en consideración por los órganos judiciales.
Estamos ante una clara ingerencia del Ejecutivo y del CGPJ en el Poder Judicial, lo que vulnera el derecho a la figura del juez con apariencia de imparcialidad, doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que forma parte del derecho español, además de una clara colaboración en la comisión de delitos contra la integridad psicológica de padres e hijos, lo que nos lleva a...
¿Crimen de Lesa Humanidad?
Esta inhibición/ fomento del maltrato por Alienación Parental ¿nos sitúa ante el supuesto de crimen de lesa humanidad contemplado en el Estatuto de Roma?
Parece claro, la Alienación Parental, como programa implantado en el cerebro de un hijo a través del lavado de cerebro realizado por un padre, para provocar el divorcio parental (traducción correcta del término ingles Parental Alienation), tiene claros genes criminales que la administración debería de perseguir, en lugar de proteger y fomentar por cuestiones ideológicas.
¡Urge la reforma del código penal! para que contemple como delito, las conductas delictivas que podrían catalogarse como crímenes de la mente y que básicamente tienen que ver con el lavado de cerebro que se emplea en reclutar terroristas, trata de blancas, sectas y alienación parental, entre otras actividades delictivas que, como podéis comprobar, son de un gran alcance delictivo. Dejarlos impunes es un grave acto de irresponsabilidad que a nadie beneficia.